Cuando empezamos la adecuación de este local comercial a finales de Noviembre de 2019, terminarlo en las 9 semanas previstas por el planning era todo un reto. El grupo inversor necesitaba empezar 2020 con una nueva apertura en el mes de Enero, limite improrrogable para terminar las obras.
La actuación preveía en primer lugar, una intervención estructural, un corte de forjado para eliminar el altillo entre planta baja y primera y inundar de luz el fondo de la tienda, además de la creación de una nueva escalera metálica de conexión entre los niveles.
En segundo lugar, nos quedaba modificar la distribución, crear nuevos volúmenes según los dictámenes del proyecto, revestir con los acabados propios de la imagen de marca. En tercer lugar, aplicar los elementos típicos de decoración y attrezzo que dan a la tienda esta imagen fresca, desenfadada, actual.
